domingo, 25 de septiembre de 2011

Buenos propósitos: descanso


Está siendo un fin de semana un tanto femenino, digámoslo así. Cuando pequeñas piedras en el camino impiden darlo todo un fin de semana, dan paso a otros planes mucho más personales y menos sociales.

Éste ha sido un fin de semana para mi, para investigar en Internet, bloggear, seguir engordando mi carpeta de inspiraciones, ver películas, series... Ha sido un fin de semana de sofá y manta, tés, cremas, mascarillas y muchos mimos.

Hay veces en las que el cuerpo te pide un punto y aparte. Un alto en el camino para pensar y prepararte para lo que viene. No siempre es imprescindible hacer hacer y hacer sino que a veces la mente pide un descanso para dejar de hacer y simplemente estar.

Besos.

jueves, 22 de septiembre de 2011

Jugando con palabras: RUTINA

¿Es la rutina realmente algo malo en nuestro día a día?

Últimamente se viste de tintes negativos la palabra, renovarse, sorprenderse cada día, huir del aburrimiento... Creo que algo de cierto hay en esa necesidad de sentir que estamos viviendo nuestras vidas, sacar lo cotidiano a pasear para que se inunde de ese nosequé que nos hace ilusionarnos cada día. Dejar sitio a la incertidumbre, a la sorpresa.

Sin embargo, no nos engañemos. La estabilidad de cobrar a fin de mes es más que necesaria. Tener todo bajo control, saber que el camarero del bar de siempre olvidará como todos los días nuestra sacarina, saber que el fichero que ayer dejamos sobre la mesa seguirá allí y que el autobús llegará con dos minutos de retraso por el semáforo que hay antes de la parada.

La incertidumbre y la inestabilidad nos hacen vulnerables, son dos señoras que nos pillan con el pie cambiado. Nuestro miedo a no saber reaccionar, a no ser ágiles en buscar una rápida respuesta nos cohíbe.

Creo que debemos dejar de culpabilizar a la rutina por nuestra apatía. Siempre me han enseñado en casa que los extremos no son buenos, en esto también debemos de encontrar un término medio que nos ayude a ser un poco más felices cada día.

Para la próxima partida: BELLEZA

lunes, 19 de septiembre de 2011

Jugando con palabras: VÉRTIGO



Vértigo contiene la letra V de precipicio. Su forma me recuerda una caída al vacío a no ser que construyas un puente para poder pasar al otro lado. Asimismo, de eso trata el hecho de ir quemando etapas y seguir construyendo puentes.

Sin embargo, nada parece fácil ante el borde del primer palo de la V. La simple posibilidad de dar un paso en falso y caer paraliza a cualquiera, aterroriza y nubla la vista. Entonces es el momento de empezar a crecer, olvidar la caída libre y poner la primera piedra del puente que llega al otro lado.

Los precipicios no sólo son cosa de grandes cumbres sino cualquier pequeña ladera puede llegar a tener una inclinación que te obligue a optar diferentes caminos. Por esa razón no creo que siempre sea necesario construir puentes sino que pensar caminos alternativos también puede hacernos llegar.

La vida se compone de todas las letras del abecedario, sin cada una de ellas algo dejaría de rodar. Necesitamos precipicios para construir puentes y una vez cruzado sentir que la caída tampoco era tan peligrosa y sentirnos orgullosos de lo que vamos consiguiendo con los años.


La siguiente partida: inestabilidad